En el majestuoso conjunto de la creacion, nada hay que me conmueva tan hondamente, que acaricie mi espiritu y dé vuelo desusado a mi fantasia como la luz apacible y desmayada de la luna.
Porque ha llegado un momento en el que siento que todo está en su sitio, es cómo si ahora fuera mi turno, mi famila, mis estudios, mis amigos, mi música y él. Y sabéis que... ¡Tengo muchísimas ganas de comerme el mundo!